Experiencia de Intercambio Internacional en El Altillo International School: Testimonio de una Familia Anfitriona
Alojar a Louane, una estudiante de intercambio francesa, en nuestro hogar durante una semana fue una experiencia increíblemente gratificante que superó nuestras expectativas. La decisión de abrir nuestras puertas surgió del deseo de fomentar el entendimiento intercultural y brindar a nuestros hijos la oportunidad de aprender sobre diferentes culturas de primera mano.
El español de Louane era bastante bueno, lo que facilitó la comunicación y nos permitió tener conversaciones significativas sobre nuestras vidas, tradiciones y diferentes perspectivas. Aunque hubo algunas pequeñas barreras lingüísticas, nos divertimos aprendiendo nuevas expresiones y formas de hablar en ambos idiomas.
Louane demostró ser una joven increíblemente madura y responsable. Se adaptó rápidamente a nuestra rutina familiar y participó activamente en las tareas del hogar. Su pasión por la cocina francesa nos llevó a explorar nuevos sabores y aromas, mientras compartíamos con ella la riqueza de la gastronomía española.
La presencia de Louane despertó una curiosidad insaciable en nuestros hijos sobre la cultura francesa. Esta inmersión cultural amplió los horizontes de mis hijos y les enseñó a valorar la diversidad.
La experiencia también nos brindó la oportunidad de reflexionar sobre nuestra propia cultura. A través de los ojos de Louane, redescubrimos la belleza de nuestras tradiciones y costumbres. Nos dimos cuenta de lo afortunados que somos de vivir en un país con una historia tan rica y una cultura tan vibrante.
A pesar de la brevedad de su estancia, Louane dejó una huella duradera en nuestra familia. Su alegría, curiosidad y mentalidad abierta nos inspiraron a ser más tolerantes, comprensivos y abiertos a nuevas experiencias. Aprendimos que, a pesar de nuestras diferencias, todos compartimos los mismos sueños y aspiraciones.
Despedirnos fue agridulce, pero nos consuela saber que hemos ganado una nueva amiga en el otro lado del mundo. Louane nos prometió volver a visitarnos pronto, y esperamos con ganas el día en que podamos volver a reunirnos y seguir compartiendo nuestras vidas.
Alojar a un estudiante de intercambio es una experiencia que recomiendo encarecidamente a todas las familias. Es una oportunidad única para aprender, crecer y crear lazos que duran toda la vida. Estamos profundamente agradecidos por la oportunidad de haber compartido nuestro hogar con Louane y esperamos repetir esta experiencia en el futuro.